Óscar Gómez/Borderless MagazineLa Comisión de Comercio de Illinois dio luz verde a Peoples Gas para reanudar las obras de sustitución de los gasoductos naturales de Chicago que presentan riesgos para la seguridad, con algunas excepciones.
Angélica Marín, de 48 años, había sido cliente de Peoples Gas durante aproximadamente 23 años cuando recibió la factura de gas más alta de la empresa de servicios públicos: un cobro de $1.000 por un mes de servicio.
La gran factura de servicios la desvelaba. Por días se preocupó sobre si podría pagar precios tan altos para mantener el calentamiento de su hogar durante los meses gélidos de invierno.
Después de atrasarse en sus pagos hace unos cinco años, Marin aplicó para el programa de presupuesto de la empresa de servicios públicos- que ofrece facturas mensuales fijas a los clientes con un estimado del consumo de gas anual.
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"Por un lado, ahora estoy más tranquila porque puedo ajustarme a un presupuesto, ya sea invierno o verano", dice Marin.
Pero Marin dijo que esa paz duró poco.
Su factura mensual fija de $75 se ha duplicado con creces en los últimos cuatro años, aumentando aproximadamente cada año, dice. A Marín le preocupa que siga aumentando y que cada vez le resulte más difícil pagarla a medida que se acerca su jubilación.
"Siempre sube, no baja, y nuestros ingresos se han mantenido igual", dijo.
Marin es una de los más de 890,000 clientes de Peoples Gas en Chicago que vieron como aumentaban sus facturas el año pasado para financiar el esfuerzo de la empresa de servicios públicos en reemplazar alrededor de 2.000 líneas de gas de hierro fundido por otras nuevas de plástico a través de su Programa de Seguridad y Modernización (SMP). La sustitución de las tuberías de gas ha sido lenta y se ha caracterizado por los retrasos, lo que ha llevado a un aumento en las facturas de gas de los clientes.
Ahora, tras una pausa de un año en el programa y a través de una investigación del estado, Peoples Gas ha recibido la luz verde de los reguladores estatales para reanudar el polémico proyecto.
El jueves, la Comisión de Comercio de Illinois (ICC) ordenó a Peoples Gas reducir el alcance de su programa y concluirlo antes de lo previsto.
"Esta [investigación] demuestra que Peoples Gas no estaba dando prioridad [a la seguridad], sino que lo seguía como uno de los diversos componentes de su programa de modernización del sistema", dijo Stacey Paradis, una de cinco comisionados de la ICC.
Programa de Modernización de Seguridad
Desde 2011, Peoples Gas ha estado trabajando para reemplazar cada una de sus tuberías de gas como parte del "Programa de Modernización de Seguridad." El proveedor de gas posee unos 3.000 kilómetros de tuberías de hierro fundido colocadas bajo tierra para transportar y suministrar gas metano para calentar miles de hogares de la ciudad.
La empresa de servicios públicos dijo que muchas líneas que transportan gas metano a los hogares tienen más de 100 años y están al final de su vida útil, por lo que deben sustituirse lo antes posible, ya que corren el riesgo de sufrir fugas o roturas. Según la Asociación Americana del Pulmón, la exposición humana al metano puede causar problemas respiratorios, sobre todo cuando se inhala en altos niveles de concentración.
Peoples Gas ha defendido en repetidas ocasiones el programa, citando la necesidad urgente de sustituir las tuberías corroídas, o se convertirán en un riesgo para la seguridad de los habitantes de Chicago y su capacidad para mantener sus hogares calientes durante temperaturas heladas.
"Los equipos de construcción tienen que volver al trabajo crítico de actualizar el sistema de suministro de energía que pasa por debajo de las calles de Chicago - una red de tuberías que se remonta a la década de 1860", explica David Schwartz, portavoz de Peoples Gas.
Pero en los últimos 14 años, Peoples Gas sólo ha reemplazado 38% de tuberías. La empresa de servicios públicos ha gastado $3.300 millones en trabajos que ya se han terminado, y el trabajo restante costaría $7.200 millones, según Peoples Gas.
Grupos de interés público criticaron las estimaciones, sosteniendo que el coste estimado del programa se había disparado de $1.420 millones en 2007 a $11.000 millones ocho años después.
Hace más de un año, el ICC inició una investigación analizando si el programa, tal como se gestiona, es asequible y práctico y da prioridad al remplazo de tuberías de alto riesgo.
La decisión de la comisión del jueves permitió a Peoples Gas reanudar su programa con algunos cambios, entre ellos:
- Enfocarse en sustituir sólo algunas tuberías que imponen los mayores riesgos para la seguridad
- Contratar a un "supervisor de seguridad" para supervisar las obras retiradas del oleoducto ordenadas por el ICC hasta su final
- Terminar las obras en los próximos 10 años, cinco años antes de lo previsto por la empresa.
"A la espera de recibir la orden final y revisarla, la Comisión dejó claro que quiere que nos centremos en la sustitución de más de 1.000 millas de tuberías para 2035", dijo Peoples Gas en un comunicado tras el fallo. "Esta dirección dada por la Comisión, en comparación con el enfoque anterior, puede requerir un coste adicional y más obras de construcción que perturben las calles en los vecindarios de la ciudad".
Historia en Curso
La decisión favorece a algunos clientes de Peoples Gas y a organizaciones que llevan tiempo pidiendo la reforma del programa, como People for Community Recovery, Illinois Public Interest Research Group (PIRG), AARP Illinois y Citizens Utility Board (CUB), un grupo sin fines de lucro de vigilancia de los servicios públicos. Estos grupos sostienen que el enfoque del programa antes de la investigación del ICC no daba prioridad a los riesgos de seguridad, era caro y provocaría más subidas de tarifas.
"La decisión de hoy de la Comisión de Comercio de Illinois es una victoria para los clientes de Peoples Gas y para todos los habitantes de Chicago", dijo el director de Illinois PIRG, Abe Scarr. "Al reenfocar a Peoples Gas en inversiones para mitigar los riesgos de seguridad, el ICC ha ordenado a Peoples Gas que ejecute un programa que cueste menos, nos haga más seguros y facilite la transición a una energía más limpia."
En 2024, Groundwork Data, una empresa de consultoría de energía limpia, publicó un informe en nombre de CUB sugiriendo que al finalizar el programa durante los próximos 15 años causaría aumentos anuales de casi 7% en las facturas de los clientes. El grupo sostiene que el programa aumentará las cargas financieras de los clientes durante décadas para cubrir los esfuerzos del reemplazo de tuberías, mientras que los beneficios de Peoples Gas alcanzan records históricos..
Peoples Gas criticó el informe, afirmando que no fue presentado al ICC para un examen más detallado a través de la investigación oficial de la comisión sobre el programa y que CUB estaba impulsando afirmaciones de un grupo "anti gas natural".
Elaño pasado, un consultor de la ciudad de Chicago testificó ante el ICC, alegando que es caro, no da prioridad a las tuberías de mayor riesgo para la seguridad y está mal alineado con los objetivos de electrificación de la ciudad.
El fiscal general de Illinois declaró que el programa debería continuar con ajustes, como centrarse más en sustituir las tuberías con mayor riesgo para la seguridad.
Tanto el estado como la ciudad cuestionaron las estimaciones de costes y plazos del programa realizadas por la empresa.
El Departamento Jurídico y el Departamento de Medio Ambiente de la ciudad se negaron a proveer una declaración sobre la orden. La oficina del fiscal general del estado no respondió a tiempo a una solicitud de comentarios.
Los cambios en el programa podrían reducir significativamente el aumento de tarifas en el futuro al reducir el gasto de Peoples Gas en el programa, dijo Scarr. A Scarr le preocupaba que el plan original de la empresa diera lugar a que miles de kilómetros de nuevas líneas de gas se convirtieran en activos inmovilizados mientras la ciudad trabaja en la transición hacia el abandono del gas metano como combustible para la calefacción doméstica, según una declaración previa a Borderless Magazine.
La decisión viene un año después de que el ICC ordenara a las tres empresas de gas, incluida Peoples Gas, que participaran en un procedimiento sobre el "Futuro del Gas" para estudiar su papel en los objetivos de descarbonización del estado. Se espera que el análisis concluya el año que viene, en 2026.
El estado ha prometido eliminar gradualmente la electricidad de carbón y gas para 2045 y aumentar las energías renovables mediante la Ley de Empleos Limpios y Equitativos (CEJA) de 2021. La ciudad también pretende electrificar 30% de los edificios residenciales existentes de aquí a 2035,según el Plan de Acción Climático 2022 de Chicago.
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Aumento de Tarifas
A medida que siguen las obras del gasoducto de Peoples Gas, los clientes han visto el aumento a sus facturas de servicios públicos y temen que dichas tarifas sigan subiendo.
Según un informe del Chicago Sun-Times de 2022, un tercio de todos los clientes de Peoples Gas ya estaban atrasados en los pagos, la mayoría de ellos en comunidades de mayoría afroamericana y latina de las zonas sur y oeste.
El año pasado, los clientes vieron un aumento de $10 en su factura, lo que supone un incremento total récord de más de $300 millones.
Esther Martínez, organizadora de inmigración y alquileres del Northwest Center, dijo que algunos miembros de la comunidad a los que ha asistido a veces luchan por decidir si pagar la factura de la calefacción o cubrir los gastos médicos.
"La gente tiene que elegir entre pagar su factura o invertir en su educación o su salud", dijo Martínez. "No creo que sea justo que paguen por el reemplazo de tuberías".
En medio del aumento de tarifas, los clientes pueden hacer un plan de pagos con Peoples Gas o aplicar por ayuda financiera del Community and Economic Development Association of Cook County, Inc. (CEDA) para ayudar a pagar las facturas de cualquier proveedor de gas. Los inmigrantes indocumentados con un Número de Identificación Personal del Contribuyente (ITIN) también pueden solicitarlo.
Organizaciones comunitarias como la Junta Vecinal de Brighton Park y Northwest Center ayudan a los residentes a inscribirse en el programa y a encontrar otras formas de reducir los gastos de servicios públicos. CUB también ofrece servicios virtuales gratuitos, y consultas sobre facturas de servicios públicos en inglés y español para ayudar a los clientes a ahorrar dinero en las facturas de gas.
Es un dinero que Marin y otras personas con ingresos bajos o fijos dicen que esperan ahorrar, ya que las constantes subidas de tarifas para financiar el programa de reemplazo de tuberías harán cada vez más difícil pagar sus facturas.
"No quería creerlo, pero te afecta psicológicamente estar pensando: '¿Cómo voy a pagar esto?", dijo Marin, refiriéndose a su factura de $1.000.
Por ahora, Marin dice que está buscando opciones para reducir su consumo de gas en casa, con la esperanza de instalar un sistema de calefacción y una cocina con bobinas de inducción.
"Prefiero y me gustaría hacer la transición [a la electricidad]", dijo Marin.
Aydalí Campa es miembro de 'Report for America Corps' y cubre temas de justicia medioambiental y comunidades inmigrantes para Borderless Magazine. Envíale un correo electrónico a [email protected].
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