El Título 42 toca a su fin. ¿Qué sigue para la inmigración?

El Título 42, una política utilizada por la administración Trump para rechazar a los migrantes y solicitantes de asilo en la frontera de Estados Unidos, expira el 11 de mayo. Una política fronteriza de la era COVID-19, el Título 42 ha sustituido a la ley federal de inmigración y ha detenido más de 2,8 millones de cruces fronterizos no autorizados. Los defensores de la inmigración argumentaron que estas expulsiones violaban las obligaciones de Estados Unidos hacia los solicitantes de asilo y la protección humanitaria sin justificación de salud pública.

Las autoridades de inmigración y los defensores de los inmigrantes se están preparando para que la inmigración en la frontera aumente en medio de la confusión de este cambio masivo de política. Al expirar el Título 42, el gobierno de Biden ha introducido nuevas vías y posibles obstáculos para la entrada legal de los solicitantes de asilo.

"Es difícil", dijo Erika Pinheiro, directora ejecutiva de Al Otro Lado, una organización de servicios legales con sede en San Diego y Tijuana. "Hace más difícil dar información a los migrantes cuando no sabemos exactamente cómo van a desarrollarse las cosas".

El impacto del Título 42 no se limitará únicamente a los estados fronterizos. La alcaldesa Lori Lightfoot declaró el estado de emergencia por la creciente crisis humanitaria mientras Texas sigue enviando migrantes a Chicago.

"Vamos a ver una enorme acumulación de personas que habían estado esperando en México la oportunidad de pedir asilo", afirmó Shailja Sharma, profesora de estudios sobre refugiados y migración en la Universidad DePaul. "Chicago no suele ser el primer puerto de escala para los inmigrantes y solicitantes de asilo, por lo que no disponemos de la infraestructura y los servicios que necesitan. Y necesitan muchos servicios".

Esto es lo que hay que saber sobre el Título 42 y cómo afectará su fin a los inmigrantes en la frontera.

¿Qué es el Título 42?

El Título 42 permite a la Patrulla de Aduanas y Fronteras de Estados Unidos (CBP) denegar a los inmigrantes la entrada en Estados Unidos para evitar la propagación de enfermedades infecciosas. Las administraciones Trump y Biden han utilizado el Título 42 para expulsar a cientos de miles de migrantes sin permitirles pasar por el proceso habitual de solicitud de asilo.

El Título 42 no es una ley de inmigración por diseño. Forma parte del Código General de EE.UU., que regula la salud pública, el bienestar social y los derechos civiles. La política fronteriza a la que se refiere el "Título 42" procedía inicialmente de una oscura disposición de un proyecto de ley de salud pública de 1944(42 U.S.C. § 265), que permite al gobierno, en situaciones de emergencia, prohibir la entrada de personas o bienes en Estados Unidos en interés de la salud pública. Antes de que Trump y Biden recurrieran al Título 42, el gobierno sólo había utilizado una vez una ley para impedir la entrada de inmigrantes por enfermedad. En 1929, impidieron la entrada de personas procedentes de China y Filipinas durante un brote de meningitis.

¿Por qué es importante el Título 42?

Durante la pandemia de COVID-19, la administración Trump lo utilizó para bloquear de facto la entrada de migrantes no autorizados, incluidos los solicitantes de asilo, argumentando que estas medidas eran necesarias para evitar la propagación del coronavirus en los puertos de entrada y en los centros de detención de la patrulla fronteriza. El Tribunal Supremo impidió a la administración de Biden levantar el Título 42 el año pasado. La administración de Biden ha seguido utilizándolo tanto en la frontera entre Estados Unidos y Canadá como entre Estados Unidos y México, expulsando a los migrantes sin permitirles solicitar asilo u otras protecciones humanitarias.

Desde el 2020, CBP ha llevado a cabo más de 2.8 millones de expulsiones en virtud del Título 42. La norma se utiliza ahora de forma rutinaria para sustituir a la ley federal en la frontera entre Estados Unidos y México a pesar de que otras restricciones de viaje por pandemia están desapareciendo en todo el país.

¿Cómo ha influido el Título 42 en los encuentros con inmigrantes en la frontera?

En virtud del Título 42, la CBP devuelve inmediatamente a México o a su país de origen a los migrantes no autorizados. Para solicitar asilo, los solicitantes deben estar físicamente presentes en Estados Unidos o presentarse en un puerto de entrada estadounidense con un temor fundado de persecución en su país de origen. El Título 42 ha eliminado las oportunidades de que los inmigrantes soliciten asilo al impedir la entrada en sí. Por ello, las expulsiones en virtud del Título 42 han suscitado críticas de organizaciones de inmigrantes y de derechos humanos por poner en peligro a los solicitantes de asilo y vulnerar sus derechos. Un estudio de Human Rights First también concluyó que la política discriminaba a los haitianos y a otros solicitantes de asilo negros.

Desde el 2020, la dependencia del gobierno de EE.UU. del Título 42 también ha aumentado el número de cruces repetidos en la frontera entre Estados Unidos y México. Debido a que el Título 42 no se basa en las leyes de inmigración existentes, estas expulsiones no conllevan sanciones por entradas repetidas. Además, como las expulsiones en virtud del Título 42 no distinguen entre los que buscan protección humanitaria y otros migrantes, su uso ha animado a los migrantes a cruzar la frontera varias veces después de la expulsión. El número de migrantes detenidos repetidamente por la patrulla fronteriza aumentó del 7% antes de la pandemia al 27%. Las redes de contrabando de migrantes se han beneficiado en gran medida de las rápidas expulsiones del Título 42.

¿Cuándo termina el Título 42?

El Título 42 terminará a las 11:59 p.m. EST del 11 de mayo del 2023, al expirar la emergencia de salud pública nacional COVID-19. A partir del 12 de mayo, los Estados Unidos volverán a la ley federal normal de inmigración y asilo bajo el Título 8. Esta transición se producirá inmediatamente.

El Título 8 conlleva consecuencias más estrictas para la entrada no autorizada, incluida la prohibición de reingreso durante cinco años. El gobierno de Biden cree que estas sanciones disuadirán a largo plazo de cruzar la frontera, al tiempo que permitirán a los solicitantes de asilo presentar sus solicitudes.

Aunque muchos congresistas abogaron por la supresión del Título 42, algunos están presentando legislación para prorrogar efectivamente el Título 42 durante dos años más sin una emergencia de salud pública, pero este proyecto de ley aún no ha aparecido en el Congreso.

¿Qué ocurrirá tras la expiración del Título 42? ¿Qué repercusiones cabe esperar?

El Departamento de Seguridad Nacional de EE.UU. (DHS) espera que inicialmente aumente la migración en la frontera. Algunos migrantes expulsados en virtud del Título 42 podrían regresar para reclamar asilo y la protección humanitaria a la que tenían derecho en virtud de la legislación estadounidense. Las redes de contrabando también pueden aprovech arse de la confusión tras este cambio masivo de política. Debido a este aumento previsto, es posible que pase algún tiempo antes de que disminuyan los cruces fronterizos no autorizados.

El Secretario del DHS, Alejandro Mayorkas, afirma que la administración está preparada para que el Título 42 llegue a su fin. "Estamos construyendo vías legales para que la gente venga a Estados Unidos sin recurrir a los contrabandistas", dijo Mayorkas en una reciente conferencia de prensa. "Al mismo tiempo, estamos imponiendo consecuencias a quienes no utilizan esas vías y, en cambio, emigran irregularmente a nuestra frontera sur". El gobierno de Biden está desplegando 1.500 soldados en la frontera entre Estados Unidos y México, que se suman a los 2.500 efectivos de la Guardia Nacional que ya prestan apoyo a la CBP.

Con la retirada progresiva del Título 42, la administración está ultimando una nueva normativa destinada a disuadir a los solicitantes de asilo de cruzar la frontera sin autorización. Con arreglo a esta nueva normativa , los inmigrantes deben primero solicitar asilo en los países que atraviesan y que se les deniegue antes de poder solicitarlo en un puerto de entrada a Estados Unidos. Organizaciones de defensa como ACLU, Human Rights Watch y la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos sostienen que esta política violará los derechos de los solicitantes de asilo y les negará protección. Se espera que este cambio de política tenga lugar en mayo. Además, el CBP exige ahora a las personas que solicitan asilo o libertad condicional humanitaria que utilicen una aplicación, CBP One, para concertar citas para presentar su solicitud. Los que intenten entrar en el país sin esperar una cita serán rechazados, a pesar de que algunos inmigrantes no tienen acceso a teléfonos o a Internet y muchos tienen dificultades para hacer funcionar la aplicación.

El gobierno de Biden también anunció que crearía centros de tramitación de inmigrantes que actuarían como centros regionales en América Latina. Estos centros estarían situados en puntos clave por los que pasan muchos migrantes en su camino hacia EE.UU. para determinar si cumplen los requisitos para el reasentamiento tradicional de refugiados, los programas de visados familiares, las iniciativas de patrocinio para determinados países o los visados de trabajo temporales. Si cumplen los requisitos, los migrantes serán remitidos por estas vías a la entrada autorizada y a los servicios sociales de EE.UU., Canadá o España. Los centros regionales de tramitación empezarán a funcionar en Guatemala y Colombia, y está previsto ampliarlos a otros países en el futuro.

La administración de Biden ha puesto en marcha nuevas vías legales a través de la libertad condicional humanitaria. El DHS está introduciendo nuevos procesos de libertad condicional para la reunificación familiar en El Salvador, Guatemala, Honduras y Colombia, y ampliando los procesos de libertad condicional en Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela. Los procesos de libertad condicional ofrecen a los solicitantes de asilo una estancia temporal y la posibilidad de trabajar en Estados Unidos mientras el DHS gestiona un importante retraso en la tramitación del asilo.

Las organizaciones sin ánimo de lucro y las comunidades locales de la frontera se están preparando para la ingente tarea de explicar estos nuevos cambios políticos a los inmigrantes que llegan. Muchas de estas organizaciones trabajan a pesar de las importantes limitaciones de recursos.

Aun así, algunos como Christine Neumann-Ortiz, de Wisconsin, directora ejecutiva de Voces de la Frontera, aplauden el fin del Título 42. "Ahora es el momento de cerrar este vergonzoso capítulo de la historia de Estados Unidos y reflejar las aspiraciones y los ideales de este país de acoger a quienes huyen de la pobreza, la persecución y la violencia", dijo Neumann-Ortiz.

En Chicago, organizaciones de defensa de los inmigrantes como The Illinois Coalition for Immigrant and Refugee Rights dicen estar preparadas para lo que el fin del Título 42 podría significar para las comunidades locales.

"Ahora, al expirar el Título 42, Chicago e Illinois podrían ver un aumento de inmigrantes. Para ser claros: las comunidades de nuestra ciudad, estado y nación están preparadas y dispuestas a acoger a los inmigrantes, y a luchar por políticas y recursos que garanticen que puedan empezar el siguiente capítulo de sus vidas con dignidad y respeto. El gobierno federal debe dar un paso adelante para garantizar que los recursos de emergencia lleguen a las ciudades y los estados, y el Presidente Biden debe tomar medidas para restablecer el proceso de asilo y proporcionar permisos de trabajo a los migrantes mientras los casos de asilo están pendientes."