Block Club Chicago y Borderless Magazine siguieron a 10 de los miles de migrantes venezolanos enviados a Chicago como parte de la maniobra política del gobernador de Texas, Abbott, este año.
En Detrás de los Autobuses, Block Club Chicago y Borderless Magazine siguieron a 10 de los miles de inmigrantes venezolanos enviados a Chicago como parte de la maniobra política del gobernador de Texas Abbott este año. Block Club Chicago es una redacción sin fines de lucro centrada en los vecindarios de Chicago; suscríbase a su boletín diario. Borderless Magazine es una redacción multilingüe sin fines de lucro que informa sobre y con los inmigrantes de Chicago; suscríbase a su boletín semanal.
CHICAGO - "Estamos agradecidos de estar en un lugar que nos recibió con los brazos abiertos".
El sábado antes de el Día de Acción de Gracias, familias se sentaron alrededor de mesas decoradas con platos llenos de comida, participando en una tradición consagrada: enumerar las cosas por las que están agradecidos. Para los 500 inmigrantes reunidos en un hotel del área de Chicago, era la primera vez que celebraban la fiesta estadounidense, y los voluntarios tuvieron que explicarles su historia y significado. Después del viaje que habían hecho este año, muchos dijeron estar agradecidos por muchas cosas.
¡Dale poder a las voces de los inmigrantes!
Nuestro trabajo es posible gracias a las donaciones de personas como tú. Apoya la información de alta calidad haciendo una donación deducible de impuestos hoy mismo.
La multitud reunida en el hotel son los nuevos vecinos de la zona, algunos de los 3,700 inmigrantes que han sido trasladados a Chicago en autobús desde el 31 de agosto en la maniobra política del estado de Texas. La mayoría de ellos llegaron a Estados Unidos procedentes de Venezuela, país el cual ha sufrido una agitación política y una crisis económica que ha provocado una grave escasez de alimentos y medicinas, una inflación galopante y un aumento de desempleo y delincuencia violenta.
Para noviembre, más de 7.1 millones de venezolanos han huido de su país. El mosaico de políticas de inmigración de Estados Unidos no deja claro si muchos de ellos tienen derecho a asilo u otras protecciones.
Durante meses, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha enviado a los migrantes que cruzaban la frontera entre Estados Unidos y México a ciudades lideradas por demócratas a más de 1,000 kilómetros de distancia para protestar contra las políticas federales de inmigración. Miles de personas ya habían llegado a Nueva York y Washington D.C. cuando Abbott añadió Chicago a su lista de destinos este verano.
A medida que llegaban los autobuses de 50 a 100 personas, los funcionarios de Chicago recibieron un aviso con unas horas de antelación de que un nuevo autobús estaba en camino, o de que no iba a haber ninguno. Poco después, los autobuses comenzaron a llegar casi cada dos días. Los funcionarios no tenían forma de saber lo que la gente a bordo necesitaría después de soportar meses de viaje desde casa.
A pesar de tener cero comunicación o coordinación por parte de el estado de Texas,los líderes de Chicago se comprometieron a ayudar. Funcionarios de la ciudad y del estado convirtieron hoteles y edificios vacíos en refugios temporales. El gobernador JB Pritzker declaró el estado de emergencia y activó a los miembros de la Guardia Nacional de Illinois para recibir a la gente en los refugios. Las organizaciones sin fines de lucro anunciaron campañas de donación. Los socios de la comunidad ofrecieron su tiempo para alimentar, transportar y vestir a la gente. Las escuelas matricularon a cientos de niños recién llegados.
Chicago es un puerto de entrada histórico para muchos inmigrantes, pero la falta de comunicación estatal y de coordinación federal dificultó la rápida llegada de cientos de nuevos inmigrantes, dijo Nubia Willman, jefa de compromiso comunitario de la ciudad y ex directora de la Oficina de Nuevos Estadounidenses de la ciudad.
Las autoridades municipales sabían que Chicago pronto podría ver inmigrantes trasladados en autobús como con Nueva York y Washington D.C., pero prepararse para el "qué pasaría si" y la realidad son dos cosas distintas, dijo.
Cuando otros grupos de inmigrantes llegaron a Chicago, muchos tenían patrocinadores privados, visas de inmigrante especiales o beneficios de reasentamiento de refugiados a través del gobierno federal, dijo Willman. Pero las personas que llegaron este verano y otoño procedentes de Texas no están en esa situación y necesitan ayuda para asentarse en la ciudad, dijo. Los funcionarios también observaron que había más personas que se quedaban en Chicago que en Nueva York o D.C.
"¿Cómo los apoyamos cuando normalmente no ha sido nuestro papel? Creo que eso es ... lo que todos estamos trabajando juntos para averiguar", dijo Willman.
A pesar de los esfuerzos de la ciudad, la rápida reubicación ha dejado a algunos inmigrantes aislados y abandonados en hoteles de las afueras, sin poder trabajar, sin la vestimenta que necesitarán para los duros inviernos de Chicago y batallando con la depresión.
Leer más
El concejal de Chicago Byron Sigcho-López (25º), inmigrante ecuatoriano que representa a una circunscripción en la que viven muchos inmigrantes mexicanos y chinos, visitó un hotel que aloja a inmigrantes en los suburbios y le preocupó encontrar niños sin escuela, personas sin abrigos y familias sin comida.
La ciudad no estaba "en absoluto" preparada para hacer frente a esta crisis humanitaria, afirmó. Ha pedido a la ciudad que considere la reapertura de las escuelas e iglesias cerradas en su distrito del Southwest Side para que los inmigrantes recientes de Venezuela, Colombia, Nicaragua y otros países de Centroamérica y del Sur puedan encontrar apoyo entre sus compatriotas hispanohablantes en lugar de ser rechazados.
Cuando los autobuses de Texas llegaron a la estación Union Station de Chicago, Erendira Rendon, vicepresidenta de justicia para inmigrantes del Proyecto Resurrección, con sede en Pilsen, les explicó a la gente cuáles eran sus opciones.
Todos los niveles de la administración local "dieron un paso adelante" para garantizar que se cubrían las necesidades inmediatas de la gente, dijo Rendón. Pero conforme las llegadas de autobuses se en noviembre y diciembre, y algunos inmigrantes han pasado meses en refugios temporales, los líderes inmigrantes quieren saber cuál es el plan a largo plazo.
"Los retos son muy reales y siguen siéndolo, y va a ser necesario que el gobierno, la filantropía y las organizaciones sin fines de lucro se aseguren de que realmente estamos preparando a los recién llegados para que puedan quedarse y prosperar en Illinois", afirmó.
En los últimos meses, los periodistas del Block Club Chicago y Borderless Magazine siguieron a siete inmigrantes y a una familia de tres miembros que llegaron en el verano, con el objetivo de poner una cara a los inmigrantes que aparecieron en los titulares nacionales por la maniobra política de Abbott.
Huyeron de un país en crisis económica y sobrevivieron a traicioneras travesías de meses a través de Centroamérica en busca de un futuro mejor para sus familias.
Muchos de ellos llegaron aquí sin teléfono, con poco o nada de dinero y dejaron a sus hijos en casa, sin saber cuándo volverán a reunirse.
Tomás Alvarado y Carmen Ollarves sueñan en abrir su propio negocio. Jesús David Lucena Castillo espera que su nueva pasión por la fotografía le dé trabajo. Yorvi Sánchez anhela poder mantener a la familia que dejó atrás. Pero su futuro es incierto.
Esperamos que estas historias te ayuden a conocer a tus nuevos vecinos.
Nolram Cardozo
Nolram sobrevivió a un viaje mortal para poder mantener a su familia, pero el peligro no terminó cuando llegó a Chicago. Viviendo en un refugio que alberga a cientos de hombres solteros, hizo amigos y encontró trabajo temporal. Sin embargo, su vida empeoró cuando fue hospitalizado.
"Esto fue como una lección, como una alerta, para decirme que no estaba bien".
Tomás Alvarado, Carmen Ollarves y su hija Grecia
Tras abandonar Venezuela, Tomás y Carmen empiezan de nuevo en Chicago con la ayuda de un antiguo vecino de Perú. Esperan conseguir aquí ayuda médica para su hija. La niña de 2 años sufrió una hinchazón de vientre tras beber agua contaminada durante el viaje a Estados Unidos.
"Era [beber el agua sucia] o morir", dijo Ollarves.
Leer más
Jesús David Lucena Castillo
En Venezuela, Jesús soñaba con ser beisbolista profesional. Pero la búsqueda de un trabajo estable le obligó a renunciar a su sueño y lo separó de su familia durante años. Durante el Día de los Muertos, un encuentro amistoso cambió su rumbo en Chicago y le ayudó a encontrar una nueva pasión por la fotografía.
"Cuando me pongo la cámara al hombro, me siento diferente. Como si fuera otra persona, [alguien] más grande".
Denis "Omar" Covis
Omar dejó a su esposa que está embarazada y a sus hijos y recorrió más de 5,000 kilómetros para llegar hasta aquí. Pero dice que el viaje no fue una elección, sino una necesidad. Salir de casa era la única forma de encontrar un trabajo que le permitiera mantener a su creciente familia.
"Estaba cansado de no poder mantenerlos".
Jhopsef Stiven
Jhopsef pasó años saltando de un país a otro en busca de una mejor vida. Nunca había oído hablar de Chicago, pero cuando le dijeron que se subiera a un autobús en Texas, eligió la ciudad del medio oeste del país porque le encantaba el nombre. Ahora es uno de los miles de emigrantes que vuelve a comenzar aquí sin familia ni conocimiento de la ciudad.
"No estoy seguro de lo que van a hacer con todos nosotros".
Delwuins
Como muchos jóvenes, Delwuins tiene un sueño sencillo: ganar dinero y ver mundo. Viviendo en un hotel de las afueras, sin coche ni permiso de trabajo, las opciones de Delwuins para ganar dinero eran limitadas. El joven de 21 años está solo por primera vez en su vida tras ser separado de su familia en la frontera.
"La situación es crítica, es fea en Venezuela".
Yorvi Sánchez
Yorvi vino a Estados Unidos en busca de un trabajo mejor para mantener a su familia. Encontró amigos en Chicago, pero no está deseando que lleguen las Navidades sin su hija de 7 años.
"Poder ayudarles desde aquí es la única razón por la que vine".
Maikel José Tineo
Maikel estaba emocionado por su nueva vida en Chicago. Pero desde que ha llegado, lo han dejado tirado en un trabajo, ha luchado por pagar las deudas de su viaje y ha visto cómo llevaron a su amigo a urgencias. Ahora se pregunta si debiera quedarse.
"Los Estados Unidos: siempre había soñado con eso".
Detrás de los Autobuses cuenta con reportajes de Diane Bou Khalil, Colin Boyle, Ambar Colón, Alex V. Hernández, Jesús J. Montero y Madison Savedra, y cuenta con fotografías de Jonathan Aguilar, Colin Boyle Jesús J. Montero y Enrique Reyes. Claudia Hernández tradujo las historias finales al español. Kelly Bauer, Michelle Kanaar, Stephanie Lulay, Jillian Melero, Nissa Rhee y Dawn Rhodes se encargaron de la edición visual y de los relatos. Hannah Boufford, Diane Bou Khalil y Melissa Espana planificaron la participación en las historias. Gracias a la Chicago Headline Club Foundation por apoyar este trabajo.
¡Dale poder a las voces de los inmigrantes!
Nuestro trabajo es posible gracias a las donaciones de personas como tú. Apoya la información de alta calidad haciendo una donación deducible de impuestos hoy mismo.